Hola a tod@s ¿Qué tal están? Espero que muy bien, ya han pasado varias semanas desde la última vez que escribí por aquí. Hoy quiero compartiros ésta magnifica receta que conviene hacer de vez en cuando por su sencillez , su rapidez y su exquisitez.
Para ello usé unos lomos de merluza que había descongelado, de buen grosor, cogí la sartén más grande que tenía y la llené con trozos buen grandes, como de ración.
A continuación, un buen aceite de oliva por arriba, lo justo que cubra o incluso mejor un poco menos. Poner a fuego mínimo y mover en vaivén hasta que suelten toda su gelatina. Tarda un poco más que el bacalao pero acaba ligando igual.
Una vez que el pescado esté hecho y haya soltado todo podemos sacarlo y terminar de montar con una varilla pequeña, ya solo queda poner un poquito de sal.
Ésta sería la versión básica, un buen pil pil se hace dorando unos ajitos laminados y la punta de una guindilla, que podemos apartar y volver a poner al final. Os animo a todos a probarlo, es más fácil de lo que parece.
También quiero contaros que tal fué mi quinto maratón, por fín de nuevo en Málaga y con un día espectacular, ya han pasado 11 días, me he recuperado físicamente y mentalmente para dentro de unos meses volver a entrenar.
Bien, decidí poner marcha a Málaga el sábado, para coger el dorsal, llegar al hostal y pasear un poco antes de acostarme temprano. Este año cambié de alojamiento y ha sido todo un descubrimiento porque al estar por la zona norte de la ciudad, es ideal para salir rumbo a casa al acabar la carrera, sin problemas de tráfico. Además calidad precio fenomenal y un colchón que nada tenía que envidiar al mio propio.
Después del bonito paseo por el centro y alrededores de la catedral, volví al hostal y como de costumbre me atiborré de ensalada de pasta, algo que me funciona muy bien el día antes de maratón, aunque yo normalmente haga cenas muy ligeras. Creo que estuve viendo un partido de segunda división por la tele, el Málaga precisamente y a dormir.
A la mañana siguiente salté de la cama como de costumbre, sobre las 6:30 para activar el organismo, la carrera era a las 8:45. Buen desayuno, buenos ejercicios de activación y un buen masaje en los gemelos para calentarlos con fisiocrem, todo un descubrimiento, me funcionó y tuve menos molestias que otras veces, al acabar.
Vamos a lo que importa, comienza la carrera y cojo un ritmo aparentemente cómodo, voy disfrutando , pasan los kilómetros sin novedades, por suerte no hay nada de aire y luce el sol.
Rondando el km 15 , voy pretórico, divisando la liebre de 3:15 apenas 50 metros delante de mí ¿estoy realmente donde me corresponde? Difícil respuesta, hasta el medio maratón hay mucha masificación de corredores.
Foto de la organización. |
No me saltó ningun avituallamiento, lo cual es clave para terminar con garantías pero es pasar el km 21 y noto que algo ya no va igual, me baja el ritmo bastante, no quiero ni mirar el ritmo en mi reloj.
Vamos para delante, ya lo miraré al final. Comienzo a sufrir, las largas avenidas se hacen eternas, cogemos rumbo a la zona donde está el pabellón Martín Carpena, entramos en un recinto con pistas de atletísmo, la noto durísima, realmente estoy sufriendo más que nunca.
Km 33, estoy disfrutando menos, bebo, como , como , bebo, me pasan muchas cosas por la cabeza, al menos nos dirigimos hacia donde está la meta.
Veo menos "cadaveres" que otros años, me refiero a gente que en este momento ya echa a andar o está por los suelos, quizás por que este año, el maratón es "menos popular".
Veo gente entrada en edad y que va mejor que yo, los admiro, pero ahora es momento de pensar en la llegada, visualizarlo, llegar al menos al 38, momento clave por que a partir de ahí se estrechan las calles y aumenta el apoyo del público.
Km 35, por primera vez pienso en andar, incluso lo hago para beber sin ponerme empapado, pero no puedo permitirmelo, eso haría de mi quinto maratón una pesadilla, más que un sueño cumplido.
36, mi cara debe ser un poema, me encuentro algún repecho y uff, creo que ese km se me fué a mas de 6 minutos.
En el 38 , gran zona de avituallamiento, creo que pasamos por la Rosaleda, creo que es un momento clave, aquí ya no está permitido rendirse. Aquí me llevo un golpe de realidad cuando me pasa la liebre 3:30.
La gaviota no quiso perdérselo. |
El 39 pasa rápido, la gente te lleva en volandas, enfilas camino de la catedral, yo no hay más que giros y giros y gente gritando, en el 40 calle Larios , con todo lo que ello significa en Navidad, sales y ves a lo lejos la meta, aún es como un espejismo en mitad del desierto, pero sabes que ya solo tienes que apretar los dientes y tirar para delante.
Cruzas y buscas donde sentarte , no piensas nada más, solo sentarte.
En definitiva, corrí dos carreras en una, la primera por encima de mis posibilidades y la segunda por debajo, algo que no debí haberme permitido, con la experiencia que ya tengo. Igualmente estaba feliz pero disfruté menos que otros años.
En cuanto al tiempo , 3:30, lo esperado.
Espero no haberos aburrido demasiado con mis aventuras deportivas, volveré a publicar algo antes de que acabe el año para hacer un balance y nuevos propósitos, os deseo una gran despedida de año y una Felices Fiestas, besos y abrazos...
Que buena receta y que buena maraton!.....te deseo una Feliz Navidad y los mejores deseos para tu familia el 2022!!.......Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarOttimo così cucinato il merluzzo, grazie!!!
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