Regreso al pasado, ultima receta del año y nuevos propósitos.

 Por fín se le vé al final a éste año tan malo , en general para tod@s, anoche fué la nochebuena más rara de mi vida y no por que estaramos menos personas o con mascarilla, sino porque mi suegra prefirió invitarnos a medio día y por la noche ya en casa, cené algo ligero y a las 10 y media ya estaba en el sobre.




Y que mejor para ésta rara mañana de Navidad que coger la bicicleta de montaña y hacer lo mismo que hacía hace más de 20 años con aquella Mezquita Granada de 21 velocidades, y era todo una aventura, ir a Baena por el camino de Jaén.

Un día expléndido para hacer deporte, pero apenas me he cruzado a nadie, tan solo un runner llegando a Baena y una ciclista llegando a Castro.

Hoy ni tiempo ni pulsaciones ni kms recorridos, no tengo ni idea de estos datos, tan solo me he preocupado de disfrutar, apenas salí me encontré a mi suegro y charlamos un rato, poco después me paro en lo que es la antigua fábrica de la luz, justo tras subir una gran cuesta, hago una foto panorámica pero el sol me la fastidió.




Unos kms después llega el cruce de la Baturra, creo que es así como se escribe, alli se puede tomar dirección Cañete, dirección Puente de Piedra y dirección Baena, cruzando el río Guadajoz.




A partir de aquí la carretera mejora muchísimo, hay varios kms de cuesta que la verdad los hago con mucha comodidad, mas sube y baja, rebasamos un pequeño desguace de coches a mano derecha, paso por debajo de la nacional 432 y llego a ésta glorieta, creo que ni siquiera existía las primeras veces que iba por allí. 




Apenas me paro para hacer la foto y salgo plácidamente de vuelta, si la ida es un paseo , la vuelta no cuesta nada, prácticamente todo cuesta abajo, es realmente un trayecto para todos los niveles y todos los públicos, y así fué como eché la mañana de Navidad de éste 2020.

Este paseo también me sirvió para terminar de ajustar algunas cosas de la bh, como los frenos, las calas, la altura de sillín, las presiones de las ruedas y empezar a hacerme a ella.


En otro orden de cosas , esta receta va a ser la última del año y puede ser una gran opción para aquellos que no saben cocinar demasiado pero quieren quedar bien con alguna visita, se trata de Solomillo en salsa de cerveza en 15 minutos.




Necesitamos un solomillo para unas dos personas, un par de ajos grandes, una cebolla mediana, aceite de oliva, sal, pimienta y una lata de cerveza económica.

Lo primero es cortar el solomillo en trozos de un dedo, quitar si vemos alguna telilla dura o grasa, salpimentar y dorar estas piezas en una sartén con aceite de oliva por ambas caras y reservamos. 

En esa sartén rehogar muy bien el ajo laminado y la cebolla cortada fina, añadir la cerveza y hervir dos minutos, triturar y mezclar con la carne.

Cocinar 5 minutos a fuego vivo con la sartén tapada y receta lista, ¡os encantará!.


Para terminar quiero hacer balance del blog durante este año y hablar sobre los propósitos para el siguiente.

He publicado dos veces por mes como me propuse, con el confinamiento tuve tiempo de mejorar alguna de las primeras entradas que hice hace ya 8 años y eliminé algunas que no me gustaban, además de añadir en la sección de noticias, las nuevas medidas que se tomaban con la evolución de la pandemia, así que por ese lado bien.

Para éste 2021 espero publicar también con la misma frecuencia, espero poder  traer alguna receta que no haya hecho anteriormente y algo más elaborada, quiero volver a preparar mi gran reto de correr  maratón en Diciembre y podría compartir como lo preparo y poco más , trabajar y ejercer de padre lo mejor que  pueda.


Sin más me despido, deseándoos que tengáis unas Felices Fiestas y que año que viene sea vuestro mejor año y se cumplan vuestros sueños.

Un abrazo virtual a tod@s, chao chao.

Así fue mi peor maratón.




El gran día llegó y estaba más nervioso que otros años, quizás por haber tenido que retrasarlo del 12 al 13, por previsión de agua y viento, que es lo peor para correr.

Y tuve la suerte de que el domingo saliese un día soleado y no muy frío,  salté de la cama como todos los días, sobre las 6 y media y con 6 horas de sueño, me encontraba bien.

Desayuno alguna tostada y me coloqué toda la parafernalia, incluyendo el garmin que me acompañaba por primera vez en ésta distancia.
Sobre unos 20 minutos calentando y a las 8 menos 5, ya estaba en mi coche, que es donde tenía el avituallamiento. Por delante, un circuito de 5.250 metros de ida y 5.250 de vuelta por un camino-carretera con poco desnivel y pocas curvas, todo un aliciente para intentar bajar la marca de 3:21 del año anterior.

Empiezo de noche y al poco rato ya me sobraban los guantes y los manguitos, ¡que gran día!
Primeros 10 kms con buenas sensaciones, paro el cronómetro y me tomo algo.
Media maratón sin novedad, vuelvo a parar el crono, bebo agua, como algo de fruta y continuo.
Apenas salgo me empieza a doler la rodilla izquierda, se me pasan todos los demonios por la cabeza ¡miedo, mucho miedo a no poder acabar! Son 9 meses de preparación...

Gracias a Dios , el dolor me dura solo 1 km, sigo a ritmos de 4:45 aproximadamente.  Ésto es lo que tiene  la distancia, que hay momentos para sufrir y para disfrutar como la vida misma.

Llego al km 32 de maravilla, vuelvo a parar y me avituallo, me bebo media pepsi y ésta vez me llevo un botella de agua en la mano y una mandarina.

Es el momento de la verdad, lo que llaman EL MURO, ahora, la prueba pone a cada uno en su sitio y mi ritmo se desploma prácticamente en 1 minuto por km.

Aún así sigo animado, bromeo con una persona mayor que pasa en su bici eléctrica sin pedalar "así si se va bien, eh", le digo y adelanto a una chica que trotaba por allí.

Llego a ese punto de vuelta, justo donde se juntan el camino y el río Guadajoz, "ya solo queda volver a CASTRO DEL RÍO", es una manera de motivarme.

Paso junto a una nave de ovejas y miro de reojo los perros pastores que estaban a lo suyo, ¿que pensará el dueño  que me ha visto de pasar por allí 8 veces? ¿que estoy como una p... regadera?je

Me acerco a la salida de la Fabrica de la Luz, donde se celebra nuestra Romería, el primer sábado de cada mes de junio, ¿cuantas veces habré pasado por allí en los últimos meses? muchas.




Kilómetro 3 hasta Castro, me sé los puntos kilométricos de memoria, el garmin me canta los kms con agonía, ésto se acaba.
Kilómetro 2 hacia Castro, justo en la entrada donde tiene mi suegro su casa de campo. 
Kilómetro 1, 1000 metros para disfrutar, justo donde está la empresa de mármol y la de materiales de construcción, ya solo queda dejarse caer con ese pequeño desnivel favorable, saborear esas últimas zancadas y ver el resultado final. 

Alcanzo de nuevo mi coche y paro el reloj, 3:28 es mi tiempo en éste 2020 tan convulso y tan raro.  No he dado para más, 7 minutos por encima del año pasado.

He cometido errores como no meter algún día de gimnasio  o alguna serie y además en los últimos dos meses cambié un entreno semanal de 10 km a pie por 40 de bicicleta, por hacerlo más llevadero, y no me ha funcionado.

El año que viene habrá más y mejor, tengo que aprovechar los 3 o 4 años buenos que me quedan.

Mención especial y agradecimientos a mi querida esposa Toñi Reinoso porque sin su apoyo no sería posible conseguir este reto.

Sin más me despido deseando haberles entretenido un rato y deseándoles Felices Fiestas y un feliz año nuevo.